El martes 25 de agosto de 2009, estuvimos en las fiestas de Confrides. Con todos los niños Saharauis que están pasando el verano en Altea, disfrutamos de un día de convivencia en este hermoso pueblo de montaña. Los niños corrieron por el pueblo libres como en el desierto, hicieron talleres, y desgastaron los culumpios del pueblo. Al medio día, se ofreció a todos los visitantes una paella gigante, y como es tradición, todo el pueblo sacó sus mesas a la calle para comer todos juntos. La asociación instaló una mesa informativa con la venta de productos artesanales traidos de los campamentos, el pueblo se volcó con esta causa, acudió a pedir información y a ofrecer su colaboración con el pueblo Saharaui.
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